Blogia
Los archivos lúcidos, aunque cada vez menos, que me hago mayor

Un 2008 feliz

Un 2008 feliz

 

No puedo sentarme a hacer una lista de lo que más me ha gustado de 2008 pero, como todo aspirante a ser el Nick Hornby español –somos muchos, lo sé-, quisiera hacer un repaso de lo que más me ha llamado.

Cojo Uncut, Rockdelux y Pitchfork, y veo que coinciden, a grandes rasgos. No puedo ser menos: lo paso en grande con los Vampire Weekend, me quedo absorto cuando puedo escuchar tranquilamente a Portishead, y he flipado con las voces y las melodías de Fleet Foxes –me gusta más el EP que el LP- y Bon Iver. Pero, al lado de estos dos últimos, ha pasado desapercibido Peter Broderick, un tipo a medio camino entre Copenhague y Oregón, todavía más sagrado que los barbudos de Seattle y más dolido que el llorón de For Emma. Gracias al Doctor por el descubrimiento. Qué pena que yo no le haya podido convencer con los Flight Of The Conchords

Más cosas: pensé que los Drive By Truckers estaban muertos después del nefasto A Blessing And A Curse. Tortazo de canto, pues Brighter Than Creation’s Dark es otra andanada de polvo rockero como lo fueron muchos de los anteriores. Me coloco sólo con escuchar a los Black Mountain y padezco de resaca cuando pongo el The Golden Age, de American Music Club –All The Lost Souls Welcome You To San Francisco va para canción del año-. No los conocía y he aprovechado para averiguar más de sus discos anteriores, como me ha pasado con Lambchop –sí, chuleta de cordero- y Sun Kil Moon.

Calexico ha vuelto por la puerta grande –y qué bueno, por cierto, Depedro-, a Jakob Dylan le ha hecho un gran favor Rick Rubin, quien a su vez se lo ha seguido montando con Neil Diamond. Y, si hablamos de diamantes, pongamos como joya del año a The Grand Archives, la media cabeza de los Band Of Horses que abandonó la nave a tiempo –Cease To Begin nos engañó a todos-. No timan, por mucho algodón que les pasemos, los Felice Brothers y su gran canción Frankie’s Gun, y Dr. Dog, con The Rabbit, The Bat And The Reindeer.

Y sigo: TV On The Radio, otra vez increíbles, y cada vez más asequibles –pero vaya vídeo…-. Que no se tuerzan. Sucios los Hush Arbours, pero con mucha enjundia. Relucientes e inmaculados los Death Vessel, y curioso su caso: la voz de Joel Thibodeau, un machito de pelo largo, es clavada a la muchachita de Russian Red. Quien, por cierto, me ha terminado gustando.

Tantas y tantas cosas buenas –muchas me dejo en el tintero-, y otras no tan buenas que, quien sabe, puede que te gusten. No entendí nunca el revuelo con el Evil Urges de My Morning Jacket, ni el patinazo de Will Johnson con el doble de Centromatic y South San Gabriel. No le vi mucho la gracia a Kitty, Daisy and Lewis, el cupo de revival lo ha cubierto, con buena nota, Eli Paperboy Reed –antes de morir, poneros este concierto-. Me han dejado frío Ron Sexsmith y el revolcón de Mark Olson y Gary Louris –también el LP por separado de éste-. No le he visto la gracia a Giant Sand –o son demasiado tristes, no sé…- ni compro la emoción del último de Vetiver. Y me empieza a cansar la voz de Will Sheff, el cantante de Okkervil River, y es que The Stand Ins no es la segunda parte del anterior…

Faltan cosas pero, como dice cierto locutor de radio y escritor, no tenemos ánimo de ser exhaustivos, y sí de escuchar hoy una cosa, volver a escucharla mañana y descubrir que no es tan bueno o, qué felices cuando pasa, cruzarnos con el disco de nuestra vida 24 horas después de haberlo conocido… Bienvenido, 2009.

**El vídeo es de otro que se ha salido este 2008: Langhorne Slim y la foto es de un tipo que vendía su megacolección de discos hace un par de años o cosa así**

 

1 comentario

Milhaud -

Muchos guiños interesantes a grandes bandas del año pasado, que después de todo no fue tan malo en lo musical como se pensaba.

De los que mencionas, me quedo con Fleet Foxes (yo soy más del LP que del EP) y con Grand Archives.